Vivir sin miedo

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Cuando naces en una familia cristina y muy conservadora, no sabes a lo que atenerte en tu adolescencia y juventud. Si eres de los que vas a misas regularmente y todo se lo ofreces a Dios, no cabe en tu cabeza que alguien no quiera estar embarazada, no entiendes como algo tan bonito como puede ser tener un hijo puede suponer un problema para alguien.

Procedo de una familia así, muy cristianos, de los que bendecimos la mesa y todas las noches rezamos. Yo salí de casa a la universidad hace dos años, vivo en el campus y estoy saliendo con un chico muy majo, la verdad es que llevo una vida bastante buena. Bajo ninguna circunstancia le daría un disgusto a mis padres de ese calibre, un embarazo sin estar casada sería algo muy vergonzoso para ellos, por no hablar para mí, la verdad es que mas que vergonzoso seria un contratiempo enorme porque estoy terminando mis estudios y un hijo ahora sería un gran bache, por este motivo estoy muy bien informada sobre la píldora. Cuando conocí su existencia enseguida entre en http://www.pildoradeldiadespues.es/ y me empapé de información. Cuando descubrí que la vendían sin receta médica la compré, y la tengo por si acaso.

Si es cierto que nací en una familia así, conservadora, pero tengo diecinueve años y disfruto de la vida y del sexo con mi pareja, por nada del mundo haría algo como no tomar precauciones pero como se que pueden pasar casos en los que te quedas embarazada aun habiendo puesto métodos de barrera, pues me curo en salud y estoy preparada para lo que pueda pasar.
No creo que sea algo malo ir con la iniciativa y procurando que todo vaya bien, no creo que mi padre estuviera de acuerdo conmigo porque es de los de antiguamente, de los que piensan que hay que llegar virgen al altar, con mi madre sería distinto, creo que ella me entendería y me apoyaría en mis decisiones, ella va con los tiempos aunque sus creencias están muy arraigadas y viven según les han enseñado, ella tiene más mano izquierda y sabría entender mi postura en la vida, soy una chica del siglo veintiuno, independiente, inteligente y con un futuro por delante, que no sería lo mismo si me cargara con un hijo ahora que estoy empezando a volar en solitario. Todo tiene su momento y para todo hay tiempo.